Club de cine Espigadores: ¿Terror a lo nouvelle vague?

“Lirismo tenebroso (…) enfermiza y subyugante atmósfera (…) inclasificable obra maestra». Así es como califica Carlos Boyero a Los ojos sin rostro en su crítica a La piel que habito, de Pedro Almodóvar:
“Queda muy bien que Almodóvar cite como modelo en la rueda de prensa de Cannes que la inspiración de La piel que habito es el lirismo tenebroso y la enfermiza y subyugante atmósfera que chorreaba aquella inclasificable obra maestra de Georges Franju titulada Los ojos sin rostro.”
http://elpais.com/diario/2011/09/02/cine/1314914404_850215.html
Carteles de películaEn nuestra página de cabecera, Filmaffinity, la valoración es muy alta (7,5) y abundan las críticas positivas. Es especialmente interesante aquella dedicada al ritmo:

“Ritmo, esa es la respuesta.

Algún espectador puede preguntarse a qué es debido ese ritmo lento de las primeras secuencias. Porque vemos a la protagonista enmascarada deambular tanto tiempo por las escaleras y las habitaciones de la casa. Porque el montador del filme decidió no cortar antes de tiempo cuando todos pensábamos que la secuencia no tenía nada más que contar…

Y la respuesta es el ritmo.

Sin esas secuencias previas la alargada e interminable secuencia de la operación carece de significado y esencia.

Georges Franju lo tenía muy claro: engañar al espectador seduciéndolo con un aparente thriller que en principio parecía que iba a sugerir, que no iba a mostrarnos el horror (la secuencia del deposito de cadáveres, la máscara, la ausencia de espejos, el uso del fuera de campo). Para después amplificar la violencia y dar el golpe de efecto al espectador.

Al igual que la víctima en un plano subjetivo el espectador presencia el horror. Aquello que nos habían ocultado y ahora nos van a mostrar detenidamente, paso por paso, momento por momento, pinza por pinza, bisturí por corte, thriller por horror con grima incluida.” (…)

http://www.filmaffinity.com/es/reviews/1/368901.html

Fotograma Los ojos sin rostroRostro piel“El ritmo es la clave para apreciar la esencia de la película. El problema que le veo es que para unos, yo incluido, ese ritmo le hace alcanzar la perfección y para otros transforma el filme en tedioso. Por lo que aviso que los que no soportan un ritmo lento de muchos planos al detalle, que es posible que no consigan entrar en la historia y aburrirse.”

LA INTENSA EXPRESIVIDAD DE UN ROSTRO VACÍO:

(…) “Esta recomendable (e imprescindible) película es la muestra perfecta de cómo crear suspense y terror sin necesidad de recurrir a efectos sonoros ensordecedores, chillidos continuos, casquería barata, carreras desesperadas y asesinos rocambolescos. Franju sabe infundir tensión y miedo con un estilo sutil y delicado, muy difícil de alcanzar en el mundo del cine y que desgraciadamente muy pocos han vuelto a repetir con resultados tan fabulosos.”

Rostro con vendasPara saber más:

Los ojos sin rostro, una inolvidable película de terror, por Pablo Hernández Blanco.

“(…) El guion corrió a cargo de Pierre Boileau y Thomas Narcejac —el dúo de escritores tras las novelas en que se inspiraron clásicos como Las diabólicas o Vértigo—, quienes lo basaron a su vez en el libro homónimo de Jean Redon. Bajo su manifiesta superficie de horror, hay un elemento de poesía que con frecuencia insufla un sorprendente toque de lirismo a sus escenas, dando lugar así a una macabra belleza sobre la que se sustenta la película. El equilibrio que logra entre lo lírico y lo siniestro es quizá su principal seña de identidad, y gran parte de su evocadora estética se debe a la fotografía de Eugen Schüfftan; con un tono tétrico deudor del expresionismo alemán (fue, de hecho, el encargado de los efectos especiales de Metrópolis y creador del llamado Schüfftan process), Schüfftan dota a la película de una consumada precisión visual consistente en una efectiva unión entre el film noir de la época y el Jean Cocteau de La bella y la bestia. La música de Maurice Jarre, quien unos años después compondría las memorables bandas sonoras de Lawrence de Arabia y Dr. Zhivago, es otro de sus muchos puntos fuertes.

Hay una escena en particular que siempre me llama la atención, aquella en la que vemos a Christiane con su perturbadora máscara, impenetrable e inexpresiva, puesta por primera vez, esa máscara tras la que se oculta su rostro destrozado. Es una escena tan emotiva como inquietante, ante todo porque el espectador lleva con ansiedad esperándola desde un primer momento; es aquí donde se ve el sentimiento de pérdida y sufrimiento que acompañan a Christiane que, como un pájaro enjaulado, se ve irremisiblemente confinada en la cámara de los horrores de su obsesivo padre. En un primer plano, la cámara se centra en su máscara, pero sus ojos son lo que de verdad observa, haciéndonos sentir a nosotros, los espectadores, una mezcla de rechazo y compasión, emociones enfrentadas que la película nos suscita de manera constante. Al igual que los ojos de su protagonista, Los ojos sin rostro es una película inolvidable: un lúgubre poema en blanco y negro.”

http://www.jotdown.es/2014/07/los-ojos-sin-rostro-una-inolvidable-pelicula-de-terror/

Fotogrma películaLas máscaras y los monstruos, por Juan Carlos Matilla.

“Los ojos sin rostro es sin duda su mejor película y una de las obras maestras más demoledoras y hermosas que ha dado el fantástico europeo. Hábil híbrido entre el cine de suspense a la manera de Hitchcock y el género de terror protagonizado por científicos desquilibrados, Los ojos sin rostro es un poema fílmico fúnebre, lírico, falsamente luminoso y estremecedor en todos sus detalles.”

http://www.judexfanzine.net/v3/fitxa.php?id=26

fotograma Los ojos sin rostroLa belleza perturbadora del cine manierista, por Manu Argüelles.

http://cinedivergente.com/criticas/singularidades/los-ojos-sin-rostro

Sobre Georges Franju:

http://es.wikipedia.org/wiki/Georges_Franju

Cartel eyes without a faceLos ojos sin rostro (Les yeux sans visage, Georges Franju, 1960) 88’

5 de febrero de 2015, 19:00 h – Salón de actos de la Biblioteca Pública de Valladolid

2 comentarios en “Club de cine Espigadores: ¿Terror a lo nouvelle vague?

  1. Los ojos sin rostro de George Franju, fantástica y asombrosa película , antes de comentar nada, quiero dar las gracias a Arturo por la estupenda entrada con lo que nos ha regalado, y después de leer la variada y amplia información, da la impresión que no se puede decir nada más de la película, se habla de ella como una película de suspense, de terror, de ciencia ficción, y se alude a la expresión “cine manierista” de Requena, donde se abandona el cine clásico y el héroe es más bien un antihéroe.

    Es una película que crea suspense, rechazo, empatía, y todo ello sin abusar de dramatismos, donde la potencia de la imagen es increíble. Donde el ritmo es fundamental, y donde algunas escenas son difíciles de olvidar.

    El deambular por la casa de Christiane, con esa máscara, con la bata, con la figura tan frágil, con esos ojos sin rostro que están implorando “ayuda”, es como una marioneta que se mueve tirada por los hilos de su creador, y sí, creador, porque su padre espera configurarle un nuevo rostro, una nueva identidad y aquí llego a lo que quiero comentar sobre esta película, al verla da la impresión de que todo acto vale, no hay un posicionamiento moral sobre si lo que se hace esta bien o no, y a mí como espectador me sorprende que no me lo cuestiono tampoco.

    Otra increíble escena es la primera operación, -larga, pausada, meticulosa, con detalles- y a mí me sirve en mi fuero interno para pensar que la causa es buena, y no hablo en nombre de la ciencia, ese sería otro punto –que no voy a tocar-.

    La pregunta que me hago es:
    ¿El fin justifica los medios? Esto ya lo trato Maquiavelo, y él decía que sí, que se justifica, habló de ello en su obra “El Príncipe”, era una guía sólo para quienes hubieran llegado al poder, pero es una frase que podemos aplicar a todos los actos , el engañó, la maldad, el asesinato.

    La figura del padre/medico/investigador, lo que hace es ser más temido que amado y ese miedo hace que no te traicionen, esto es lo que veo en el comportamiento de su “colaboradora”, una mezcla de miedo/gratitud. Su hija consiente todo lo que su padre hace por ella, pero en esos ojos sin rostro yo veo terror, espanto y callada sumisión

    La no aceptación de lo impuesto por su padre, da lugar al desarrollo final, a esa liberación de todos, al poder volar libre a un que sea sin rostro.
    Película para recordar, sin duda.
    Respecto a los fines y los medios, como todo, tienen un punto de relatividad.

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